Amnesia epilƩptica transitoria
OBJETIVOS DE APRENDIZAJE:
ā
-
Conocer que es la epilepsia y sus distintas manifestaciones;
-
Identificar las caracterĆsticas de la amnesia epilĆ©ptica transitoria, la forma mĆ”s reciente de epilepsia descrita;
-
Diferenciar la amnesia epilƩptica transitoria de los episodios de amnesia global transitoria y de otros tipos de epilepsia;
-
Conocer los modelos teóricos y las estructuras propuestas para explicar la amnesia global transitoria.
INTRODUCCIĆN
ā
Hace mĆ”s de medio siglo Scoville y Milner (1957) publicaron el caso del paciente H.M., posiblemente el mĆ”s conocido en el Ć”mbito de la neuropsicologĆa y, sin lugar a duda, uno de los mĆ”s determinantes en el curso de esta disciplina.
ā
H.M. padecĆa epilepsia desde la infancia y, a pesar de ello, logro terminar la enseƱanza secundaria y desarrollar una actividad laboral, pero el tratamiento farmacológico no conseguĆa controlar la alta frecuencia de sus crisis. Ante tal circunstancia, los mĆ©dicos decidieron extirparlas Ć”reas donde tenĆan origen las crisis; en su caso, el lóbulo temporal de ambos hemisferios cerebrales.
En lo tocante a la epilepsia, la intervención fue todo un Ć©xito, reduciĆ©ndose las crisis de una forma mĆ”s que considerable, pero esta operación cambiarĆa la vida de H.M. tambiĆ©n en otro sentido: a partir de ese momento mostró una enorme dificultad para aprender cualquier nueva información. H.M. no podĆa recordar hechos muy recientes, ni siquiera reconocer a alguien que se habĆa presentado unos minutos antes, pero, en contraste con estos graves problemas, la memoria de su infancia no parecĆa mermada. De esta manera, H.M. marcó el inicio de la investigación sobre la relevancia del lóbulo temporal en el aprendizaje y la memoria y, por supuesto, su caso motivó una mayor cautela en el abordaje quirĆŗrgico de la epilepsia. En este sentido, actualmente la cirugĆa temporal sólo se realiza en pacientes cuyas crisis afecten a este lóbulo de manera unilateral.
ā
RemontĆ©monos ahora a finales del siglo XIX para encontrar la descripción que Hughlings-Jackson (1888) realizó sobre el caso del Dr., Z, un neumólogo que sufrió una crisis epilĆ©ptica durante la exploración de un paciente. El hecho de estar llevando a cabo una exploración serĆa irrelevante de no ser porque durante la crisis continĆŗo efectuĆ”ndola, en este caso a un niƱo, y llegó incluso a emitir el diagnóstico e indicar que el menor continuarĆa ingresado. Pasadas unas horas, en conversación con un compaƱero, el Dr. Z comenzó a recordar al paciente y con gran curiosidad se dispuso a revisar su historial. Su sorpresa fue mayĆŗscula cuando advirtió que en Ć©l se encontraba un diagnóstico y la recomendación de continuar ingresado, pero, ademĆ”s, cuando volvió a examinar al niƱo, sus conclusiones fueron las mismas. En definitiva, habĆa sido capaz de valorar con Ć©xito a un paciente sin tener conciencia de haber realizado el diagnóstico.
ā
Tanto el caso de H.M. como del Dr. Z son ejemplos de epilepsia con origen en el lóbulo temporal Āæcómo es posible entonces que la manifestación de la crisis y las consecuencias neuropsicológicas sean tan diferentes en uno y en otro caso? intentar dar respuesta a esta pregunta es el objetivo de esta unidad. Para ello se describirĆ” el caso de un paciente que sufrĆa una epilepsia similar a la del Dr. Z, y se compararĆ” su perfil neuropsicológico y los mecanismos cerebrales implicados con los de los pacientes similares al caso H.M. No obstante, antes de todo ello, es conveniente introducir ciertos conceptos bĆ”sicos sobre la epilepsia, sus sĆndromes y los diferentes tipos de crisis.
ā
CONOCIENDO LA EPILEPSIA
ā
La epilepsia es una de las afecciones neurológicas mÔs frecuentes, concretamente, su prevalencia estÔ en torno a ocho casos por cada 1000 habitantes. Su manifestación principal es la conocida crisis epiléptica, provocada por la descarga abrupta y descontrolada de un grupo de neuronas. Existen diferentes tipos de epilepsias y de crisis epilépticas dependiendo de la localización neuronal de la descarga alterada (el denominado foco epiléptico) asà como el nivel de prolongación de esta actividad hacia otras Ôreas cerebrales. De este modo es posible distinguir entre crisis focales (parciales) y generalizadas, en función de si el origen de la actividad epiléptica se encuentra en un solo hemisferio es bilateral, y entre crisis complejas o simples, atendiendo a si existe o no alteración de la conciencia.
La epilepsia del lóbulo temporal ejemplificada por el caso de H.M., se corresponde con un tipo de epilepsia focal y representa el 70% de las epilepsias secundarias a una lesión cerebral.
ā
Aproximadamente la mitad de estos casos estĆ”n relacionados con una atrofia focal que afecta al hipocampo y la amĆgdala (figura 1) atrofia que se conoce como esclerosis mesial temporal. En este sĆndrome son frecuentes las crisis parciales complejas, durante las cuales la persona puede sentir miedo, sufrir parestesias y alucinaciones de distintos tipos (olfativas, visuales, auditivas) y presentar alteraciones en el lenguaje.
ā
En el lóbulo temporal tienen tambiĆ©n su origen crisis como las que presentaba el Dr. Z, en este caso, caracterizadas por un episodio de amnesia durante el cual se mantenĆan preservadas las restantes funciones cognitivas. Por ello, durante tales episodios pueden realizar de forma correcta actividades de cierta complejidad que posteriormente no recuerdan haber llevado a cabo (como se mencionó previamente cuĆ”ndo el Dr. Z emitió un diagnóstico). Este sĆndrome epilĆ©ptico se conoce como amnesia epilĆ©ptica transitoria, tĆ©rmino acuƱado por Kapur (1990). Hasta la fecha sólo existe 99 casos documentados, lo que supone una cifra posiblemente muy inferior a la incidencia real del trastorno. Como podrĆ” comprobarse, buena parte del propósito de esta unidad se centra en presentar posibles factores que puedan explicar esa subestimación.

Figura 1. Resonancia magnética (sección coronal) en la que se aprecia esclerosis temporal mesial izquierda (flechas). Nótese que la imagen muestra las coordenadas radiológicas según las cuales el hemisferio izquierdo se representa a la derecha, y viceversa.
AMNESIA EPILĆPTICA TRANSITORIA
El caso de Enrique.
ā
Enrique es un profesor de Universidad con una activa carrera investigadora y docente que a sus 63 aƱos decide realizar una estancia en el paĆs donde reside su hija. Los primeros meses allĆ transcurren con total normalidad, hasta que una maƱana de lunes, tras una semana agotadora por la preparación de una conferencia, se desorienta de forma repentina: no sabe en dónde estĆ” ni quĆ© dĆa es, sin embargo logra recordar a su hija asĆ como el nĆŗmero telefónico de Ć©sta y decide llamarla, cuando Ć©sta vuelve a casa, observa que su padre no es capaz de recordar lo que hizo el dĆa anterior, por lo que deciden acudir de inmediato al hospital en donde se realizan diferentes pruebas entre ellas un electroencefalograma (EEG) y una tomografĆa computarizada (TC) que resultan normales, atendiendo a las caracterĆsticas del cuadro, los mĆ©dicos emiten el diagnóstico de amnesia global transitoria y aseguran al paciente que la probabilidad de que se repita es baja.
ā
Esta predicción pareció cumplirse, ya que durante los 3 siguientes años Enrique no volvió a sufrir ningún episodio de este tipo y continuaba con buen ritmo su actividad académica. Sin embargo, una mañana, al tomar un taxi para acudir a una reunión fuera de su lugar habitual de trabajo, sufrió un nuevo episodio de completa desorientación. A pesar de ello, hay constancia de que acudió a esa reunión y posteriormente se trasladó a su facultad en taxi, pero no consigue rememorarlo ocurrido desde que subió al taxi hasta que, una vez en la facultad recuerda encontrarse en su despacho tratando de explicar su estado a un compañero. En esa conversación comentaba haber tomado un taxi, pero no puede precisar dónde se bajó, ni siquiera si pagó al taxista.
ā
Unos dĆas despuĆ©s acude al neurólogo y relata los dos episodios sufridos, aunque reconoce que la mayorĆa de los detalles son meras reconstrucciones, producto de conversaciones con otras personas. Afirma tambiĆ©n que en los Ćŗltimos aƱos tiene dificultades para recordar y localizar en el tiempo episodios de su vida, sobre todo los acontecidos recientemente, y para recordar información relacionada con su trabajo. De nuevo, entre las pruebas diagnósticas solo la valoración neuropsicológica detectó una alteración; concretamente, problemas leves para adquirir información (tabla 1) y de ello derivó la confirmación del diagnóstico de amnesia global transitoria, con el matiz de recurrente ante la aparición de un segundo episodio.
ā
Sin embargo, los dĆ©ficits que la evaluación revelaba no eran tan graves como los hechos que informaba el paciente cuando hablaba de lo ocurrido y de su vida cotidiana en general. En la magnitud de lo relatado habĆa indicios de que el problema en cuestión podĆa ser otro y en este sentido la historia del Dr. Z resultarĆa de gran ayuda y referencia. Ahora bien, para seguir esta pista era esencial obtener un registro encefalogrĆ”fico durante el transcurso de uno de los episodios. Por ello se solicitó a los familiares que acudieran a urgencias en caso de que volviera repetir un episodio de esa Ćndole.
Tabla 1. Resultados de la valoración neuropsicológica de Enrique

CUANDO LOS EPISODIOS DE AMNESIA SE REPITEN: DIAGNĆSTICO DEFINITIVO
ā
Durante ese aƱo se sucedieron los nuevos episodios de amnesia, siempre por la maƱana y con las mismas caracterĆsticas: desorientación temporal y espacial, amnesia retrógrada que se extendĆan a los dĆas anteriores al episodio y una acusada amnesia anterógrada. El primero ocurrió mientras se encontraba fuera de su ciudad, por lo que fue hasta el siguiente que se le pudo trasladar al hospital donde se tenĆa previsto llevar a cabo el citado registro electroencĆ©falogrĆ”fico.
ā
En ese episodio que terminó con la administración del registro, Enrique estaba impartiendo una clase y durante ella dedicó un tiempo considerable a asignar tareas a sus alumnos, pero una vez terminada esa asignación dudó de si la habĆa realizado, asĆ que volvió a hacerla. Todo ello generó un importante desconcierto en el auditorio, por lo que al tĆ©rmino de la clase los alumnos decidieron alertar a otro profesor y este lo acompañó al hospital.
ā
A su llegada al servicio de urgencias, Enrique no recordaba que habĆa sucedido y, de forma recurrente, preguntaba cómo habĆa llegado hasta allĆ. Era capaz de reconocer a las personas que lo acompaƱaban, pero mostraba grandes lagunas al intentar reconstruir vivencias con esas personas (viajes, celebraciones, congresos, etc). Estos problemas se concentraban en episodios de la Ćŗltima dĆ©cada, pudiendo en cambio relatar con detalle anĆ©cdotas sobre una estancia de un curso acadĆ©mico completo que habĆa realizado en otra universidad hacĆa mĆ”s de 15 aƱos.
ā
Estas observaciones fueron corroboradas por la valoración neuropsicológica realizada en la fase crĆtica del episodio; ahora se pudieron apreciar graves problemas para adquirir nueva información que no se detectaron en la valoración previa. Por ejemplo, en una prueba de memoria no pudo recordar ninguna de las 15 palabras presentadas 20 minutos antes. En cambio su rendimiento en tareas de memoria de trabajo y lenguaje se encontraban dentro de la normalidad y era coincidente con las puntuaciones obtenidas en la evaluación realizada seis meses antes (Tabla 2).
Tabla 2. Resultados de las valoraciones neuropsicológicas de Enrique en los periodos crĆtico y poscrĆtico

De nuevo las pruebas de neuroimagen fueron normales, incluyendo un estudio volumĆ©trico del hipocampo (figura 2) y una tomografĆa por emisión de positrones (PET). Sin embargo el electroencefalograma reveló la existencia de actividad epilĆ©ptica en Ć”reas temporal y frontal izquierda (Figura 3). Esta observación fue determinante debido a que la actividad epilĆ©ptica nunca estĆ” presente en la amnesia global transitoria; ademĆ”s, si a ello se une la recurrencia de los episodios de amnesia y las quejas subjetivas de memoria en su vida cotidiana, el caso tenĆa una gran similitud con el del Dr. Z, es decir, un caso de amnesia epilĆ©ptica transitoria.
ā
Una vez establecido este diagnóstico, comenzó el tratamiento farmacológico con carbamazepina y, transcurrido mÔs de un año, el paciente no ha vuelto a sufrir una crisis.

Pruebas diagnósticas complementarias realizadas Enrique. A) Sección coronal del cerebro en resonancia magnĆ©tica donde se muestran ambos hipocampos. B) Registro encĆ©falo grĆ”fico de la fase crĆtica que muestra actividad epileptiforme en canales temporales y frontales izquierdos.
AMNESIA EPILĆPTICA TRANSITORIA: UN SĆNDROME DE RECIENTE APARICIĆN
Descripción del sĆndrome y criterios diagnósticos
ā
Como ha podido observarse en la descripción del caso de Enrique, la amnesia epiléptica transitoria se caracteriza por episodios de amnesia sobre lo ocurrido durante la crisis, pero también por otros problemas de memoria autobiogrÔfica al margen del episodio epiléptico. a su vez, esa incapacidad para recordar lo sucedido durante la crisis contrasta con la normalidad de otras funciones cognitivas, normalidad que incluso permite emitir conductas pertinentes en esta situación. situÔndose en la tipificación de los criterios diagnósticos establecidas por el grupo de Zeman, es posible especificar, ademÔs, que estos episodios suelen durar entre 30 a 60 minutos y qué tienden en el 70% de los casos a aparecer en las primeras horas de la mañana (Zeman et al., 1998) (Tabla 3).
ā
La grave afectación mnĆ©sica en el transcurso de la crisis orienta hacia un origen temporomesial de la amnesia epilĆ©ptica transitoria, sin embargo, los componentes fisiológicos alterados aĆŗn no estĆ”n completamente esclarecidos. Se conoce que un tercio de los pacientes presenta actividad epilĆ©ptica de origen frontotemporal en el EEG, cómo Enrique, y en algunos casos se observa atrofia bilateral del hipocampo (Butler et al., 2007; Butler y Zeman, 2008; Butler et al., 2009). Ahora bien, al igual que ocurre en el caso que se presenta, es frecuente constatar resultados normales en la tomografĆa computarizada o la resonancia magnĆ©tica. Por lo tanto, puede decirse que se trata de una lesión mĆ”s reducida que la observada en la epilepsia del lóbulo temporal, en la que las pruebas de neuroimagen revelan con claridad lesiones hipocĆ”mpicas mĆ”s amplias e, incluso la implicación de la amĆgdala (Bernasconi et al., 2003).
Tabla 3. Criterios diagnósticos de la amnesia epiléptica transitoria
1.- Existencia de antecedentes de episodios de amnesia recurrente que puedan ser corroborados por testigos;
2.- Durante dichos episodios, presencia de alteración sólo de los procesos mnésicos con preservación de las restantes funciones cognitivas;
3.- Existencia de evidencia para emitir el diagnóstico de epilepsia basÔndose en uno o mÔs de los siguientes criterios:
ā
-
Electroencefalograma con signos de actividad epileptiforme;
-
Concurrencia de otras caracterĆsticas clĆnicas de epilepsia (automatismos de chupeteo, alucinaciones olfativas);
-
Respuesta a la medicación anticomical
DIAGNĆSTICO DIFERENCIAL
ā
Como ocurrió con Enrique, establecer el diagnóstico de amnesia epilĆ©ptica transitoria y descartar el de amnesia global transitoria, depende crĆticamente de que el registro encefalogrĆ”fico revele actividad epilĆ©ptica. No obstante, tambiĆ©n existen otras caracterĆsticas clĆnicas que, si bien no resultan tan determinantes, si pueden ayudar a diferenciar entre ambos sĆndromes. A este respecto, en la amnesia global transitoria es frecuente que junto con la afectación cognitiva aparezcan otros sĆntomas, como nĆ”useas y dolor de cabeza. En cambio, en la amnesia epilĆ©ptica transitoria se presentan con mayor probabilidad alucinaciones olfativas y automatismos orales conocidos como āchupeteoā. AdemĆ”s, en el caso de la amnesia global transitoria los episodios de amnesia tienen mayor duración, baja recurrencia (sólo el 6% de los casos) se resuelven sin secuelas neuropsicológicas a largo plazo.
EVALUACIĆN Y PERFIL NEUROPSICOLĆGICO DE LA AMNESIA EPILĆPTICA TRANSITORIA
ā
Como ha quedado patente, en la amnesia epilĆ©ptica transitoria, ademĆ”s de la amnesia sobre lo sucedido durante la crisis, los pacientes mencionan otros problemas de olvido relacionados con toda su vida cotidiana como con su memoria remota (autobiogrĆ”fica). Sin embargo, estas quejas son difĆciles de evaluar mediante los protocolos mĆ”s utilizados en la neuropsicologĆa. Por un lado, porque estos protocolos no evalĆŗan la memoria sobre hechos ocurridos unos dĆas antes; sólo ponen a prueba la memoria del material presentado durante la sesión, la cual no excede de 40 minutos y, por otro lado, debido a que la valoración de la memoria autobiogrĆ”fica no se realiza con frecuencia por su extensión y requerir un colaborador cercano al paciente que permita confirmar la fiabilidad de los recuerdos.
ā
Evidencia de que tales quejas de olvido no pueden ser detectadas en una sola sesión de evaluación ha sido aportada por estudios que emplean el Test de Aprendizaje Auditivo-Verbal de Rey (Butler et al., 2007); Manes et al 2005). La curva de aprendizaje propia de este test se encuentra alterada en los pacientes con epilepsia del lóbulo temporal mientras que Enrique presentaba un nivel de ejecución cercano a la normalidad. AdemĆ”s de las 5 presentaciones de la lista que permiten trazar la curva de aprendizaje, la aplicación de este test incluye dos peticiones mĆ”s de recuerdo: en primer lugar, unos minutos despuĆ©s de la quinta presentación, concretamente justo despuĆ©s de administrar y preguntar por la conocida como ālista de interferenciaā y, el segundo tĆ©rmino, pasados 30 minutos desde la quinta presentación de la lista que dio lugar a la curva de aprendizaje.
ā
En lo que respecta estos dos momentos temporales no es hasta los 30 minutos cuando los pacientes con amnesia epilĆ©ptica transitoria muestran mayor olvido que un grupo de control, pero en cualquier caso esas diferencias no alcanzan la magnitud de sus quejas de memoria. Por ello, en la exploración de la amnesia epilĆ©ptica transitoria es especialmente importante la evaluación del recuerdo varios dĆas despuĆ©s. Si se pregunta de nuevo por la lista en dos momentos temporales bastante lejanos, como 7 a 21 dĆas despuĆ©s de la primera presentación, las diferencias entre los pacientes con amnesia epilĆ©ptica transitoria y el grupo de control alcanzan gran magnitud, mĆ”s acordĆ© con sus quejas.
ā
En concreto, en uno de los estudios de Butler et al., (2007), transcurridos 7 dĆas, el recuerdo de la lista habĆa descendido hasta el 26% en el grupo de pacientes, mientras que el grupo de control aĆŗn recordaba el 66% de las palabras. Este resultado, similar a los obtenidos en otros estudios, refleja un mayor olvido con el lapso del tiempo para el caso de los pacientes con amnesia epilĆ©ptica transitoria, fenómeno conocido como ātasa de olvido aceleradaā.
ā
En definitiva, los problemas de memoria que sufren los pacientes con epilepsia del lóbulo temporal y amnesia epiléptica transitoria parecen tener distinta naturaleza. Mientras que en la epilepsia del lóbulo temporal estos problemas son debidos a alteraciones en los procesos de adquisición, en el caso de la amnesia epiléptica transitoria la información llega a ser aprendida, pero las alteraciones emergen en la forma de un olvido acelerado.
Por supuesto, las limitaciones expuestas anteriormente para detectar esos problemas de memoria en pacientes con amnesia epilĆ©ptica transitoria no invalidan los protocolos de evaluación neuropsicológica en estos casos. No debe olvidarse que, aunque las principales dificultades se centran en la memoria, es necesario descartar otros dĆ©ficits neuropsicológicos, sobre todo en el lenguaje, quĆ© podrĆa indicar la existencia de problemas mĆ”s allĆ” de la propia epilepsia. Sin embargo, como ya se ha seƱalado, han de incluirse tareas que evalĆŗen el recuerdo con varios dĆas de demora y otros aspectos de la memoria de los que se quejan estos pacientes.
ā
En cuanto a la relación entre la tasa de olvido y una posible afectación en Ć”reas temporales, por el momento la investigación no arroja resultados concluyentes. Por una parte, estudios de anĆ”lisis volumĆ©tricos revelan una reducción del volumen del hipocampo asociada a un menor recuerdo a los 30 minutos, pero esta relación no se observa con respecto al recuerdo mostrado en los dos momentos temporales mĆ”s lejanos 7 a 21 dĆas despuĆ©s del aprendizaje (Butler y Zeman, 2008). En cambio, Stickgold (2005) sigue considerando que los problemas para recordar varios dĆas despuĆ©s estĆ”n vinculados a alteraciones en los procesos de consolidación dependiente del hipocampo, pero sitĆŗa esos problemas en el periodo de sueƱo. Este autor basa su hipótesis en la tendencia de las crisis aparecer en las primeras horas del dĆa, circunstancia que podrĆa sugerir un inicio de la actividad epilĆ©ptica durante la noche. Esta actividad afectarĆa los procesos que durante el sueƱo permiten consolidar la memoria de lo acontecido durante el dĆa anterior, procesos que tendrĆan al hipocampo como estructura fundamental.
ā
Desde este punto de vista, los problemas de olvidos se explicarĆan por una interrupción en los de consolidación del sueƱo, mĆ”s que por la presencia de un daƱo en el hipocampo.
ā
De este modo serĆa compatible sostener la relación entre el lóbulo temporal y la tasa de olvido acelerada aĆŗn en ausencia de atrofia estructural en el hipocampo. No obstante, tambiĆ©n es cierto que la tĆ©cnica de estudios volumĆ©tricos todavĆa presenta ciertas limitaciones, por lo que no puede descartarse que estĆ©n pasando inadvertidas lesiones en Ć”reas temporales.
ā
MEMORIA AUTOBIOGRĆFICA
ā
En la prĆ”ctica clĆnica, el estudio de la memoria autobiogrĆ”fica se realiza fundamentalmente mediante la entrevista de memoria autobiogrĆ”fica desarrollada por Kopelman, Wilson y Baddeley (1989), con la que, ademĆ”s de explorar recuerdos de la vida de esa persona, se evalĆŗa el conocimiento relativo al Ć”mbito de la memoria semĆ”ntica, es decir, el conocimiento general desprovisto del lugar y del momento en el que se adquiere. En el caso de esta entrevista, dicho conocimiento hace referencia a hechos relacionados con la persona evaluada, por ejemplo, nombres de amigos, fechas relevantes, direcciones, etc.
ā
Al igual que Enrique, alrededor del 50% de los pacientes que sufren amnesia epilƩptica transitoria presentan problemas para recordar acontecimientos de su pasado, especialmente de lo sucedido durante las dƩcadas mƔs cercanas al inicio de la crisis.
Este patrón se repite tambiĆ©n para la memoria semĆ”ntica, (Milton et al 2010), especialmente para aquella relacionada directamente con la persona y, en menor medida, con hechos de conocimiento pĆŗblico. Dentro de este Ćŗltimo Ć”mbito Milton et al. (2010) constataron algunos problemas para recordar si ciertos personajes pĆŗblicos vivĆan y las causas de su muerte; en cambio no hallaron dificultades para reconocer el rostro de personajes famosos. En estas cuestiones se pueden establecer tambiĆ©n escalas temporales por dĆ©cadas en función de cuando fallecieron o, en el caso del reconocimiento a partir del momento en que pasaron a formar parte del conocimiento colectivo.
Al igual que ocurre con la tasa de olvido acelerada, los estudios volumétricos realizados hasta la fecha no han mostrado una reducción del volumen del hipocampo asociada, en este caso, a las alteraciones en la memoria remota (Butler et al., 2009). Sin embargo, la existencia de problemas similares en pacientes con esclerosis del hipocampo y en los que han sufrido la recepción de estructura y otras Ôreas adyacentes (Lah et al., 2004) sugiere una posible conexión entre deterioro del hipocampo y dificultades para recordar episodios remotos.
ā
En consonancia con esa posibilidad, en el Ć”mbito de la neurociencia cognitiva se ha evolucionado desde modelos de memoria que circunscribĆan el papel del hipocampo Ćŗnicamente a la fase de adquisición (Squire et al., 1984) hasta marcos mĆ”s recientes, como la teorĆa del trazo mĆŗltiple de memoria (Nadel y Moscovitch, 1997), que asignan al hipocampo una función clave tambiĆ©n en la recuperación de episodios lejanos del pasado.
ā
Esta teorĆa propone que la información referente a este tipo de episodios se corresponde con conexiones entre el hipocampo, regiones de la corteza temporal, frontal y occipital, asĆ como el cerebelo. Estas conexiones permitirĆan recuperar los detalles que hacen distintivo un episodio pasado, pero serĆa el hipocampo la estructura primordial para vincular la información procedente de las diferentes estructuras y crear un recuerdo que aĆŗne toda la información que se ha retenido sobre un episodio particular de la propia vida.
ā
Asimismo, cada vez que recordamos algo que nos aconteció, el hipocampo también ejercerÔ sus funciones de codificación y, por ello modificarÔ las conexiones establecidas introduciendo nueva información sobre el contexto en el cual se estÔ evocando el recuerdo. Por lo tanto, el recuerdo de un episodio, a su vez, extiende, modifica y refuerza el trazo inicial, ademÔs de crear nuevos trazos, lo que explica por qué las experiencias mÔs lejanas son mÔs resistentes a los efectos de una lesión cerebral. En otras palabras, cuanto mÔs antiguo es un recuerdo, mayor probabilidad existe de que hayamos viajado a nuestro pasado a través de la memoria autobiogrÔfica, y cada uno de esos viajes añade o cambia lo que recordamos. Es por ello, que los problemas de memoria autobiogrÔfica en la amnesia epiléptica transitoria se circunscriben a las décadas próximas al inicio de las crisis epilépticas.
RESUMEN
ā
Lesión inicial:
-Juicio clĆnico: amnesia epilĆ©ptica transitoria (tras descartarse el diagnóstico inicial de amnesia global transitoria).
- Hallazgos en pruebas complementarias: TC, PET, estudio volumĆ©trico del hipocampo y EEG IntercrĆtico normales; EEG crĆtico con actividad epilĆ©ptica en Ć”reas temporal y frontal izquierda.
ā
Perfil neuropsicológico: en periodos IntercrĆticos, problemas leves en la adquisición de la información y en la memoria autobiogrĆ”fica; durante las crisis, grave alteración en las capacidades de aprendizaje de nueva información.
Papel del hipocampo en la consolidación del recuerdo y en los procesos de codificación y recuperación de recuerdos remotos de la memoria autobiogrÔfica.
ACTIVIDADES DE APRENDIZAJE:
ā
1.- Realice una reflexión y un anÔlisis de las valoraciones expuestas en el siguiente recuadro y lleve a cabo las actividades sugeridas.
Esta actividad deberĆ” realizarla de puƱo y letra y enviar fotografĆa legible de la misma a mĆ”s tardar el dĆa 14 de junio.
COMPRENSIĆN DE LECTURA
ā
Analice con detenimiento los siguientes cuestionamientos y plasme sus respuestas como se indica en la instrucción.
ā
1.- ĀæCual es el tema de la presente unidad?
2.- ĀæComo considera que se obtuvieron los parĆ”metros para determinar que Enrique padecĆa una amnesia global transitoria tras su primer crisis ?
3.- ¿En que año se documentó el caso mÔs importante que dio referencia al estudio del tema que nos ocupa?
4.- ¿Que fue lo que le sucedió al Dr. Z?
5.- ĀæPorque considera que la facultad cognitiva de explorar a su paciente no se vio afectada a pesar de que el Dr. Z presentó sĆndromes de epilepsia?
6.- ĀæDe acuerdo a la estadĆstica presentada en el texto de esta unidad a cuantas personas afecta la epilepsia?
7.- ¿En que consiste la epilepsia del lóbulo temporal?
8.- ¿Porque considera que tras la extirpación de los lóbulos temporales el paciente H.M. mostró gran dificultad para recordar hechos recientes?
9.- ĀæQue es la esclerosis?
10.- ¿Porque considera que Enrique en su primer crisis epiléptica a pesar de desorientarse en tiempo y lugar si recordó quien era su hija asà como su número telefónico?
11.- ¿Cuales fueron los estudios que le practicaron a Enrique después de sufrir su segunda crisis epiléptica?
12.- ¿Que sucedió cuando Enrique fue llevado por segunda ocasión al hospital y quien lo acompañó?
13.- ĀæQue estudio o estudios revelaron que Enrique padecĆa afectaciones a nivel del hipocampo?
14.- ¿Cuales fueron en particular las pruebas neuropsicológicas que le practicaron a Enrique?
ā
2.- Investigue y defina los siguientes tƩrminos:
ā
a).- Crisis epilƩptica;
b).- Foco epilƩptico;
c).- Convulsión;
d).- ClonĆa;
e).- Automatismos orodeglutorios;
f).- Movimientos versivos;
g).- EstƔtus epilƩptico;
h).- Carbamazepina;
i).- Ćcido valproico;
j).- Topiramato
ā
3.- Descargue las imÔgenes contenidas en el archivo PDF que se anexa; identifique las estructuras anatómicas que se muestran y coloree las mismas en base a las instrucciones que se indican.
ā
Las actividades 2 y 3 deberĆ” remitirlas por correo electrónico a mĆ”s tardar el dĆa 13 de junio, pero la tercera deberĆ” ser compartida en el foro de discusión.
4.- Descargue la información contenida en el archivo PDF que se muestra a continuación; lea y analice con detenimiento la misma; busque el apoyo de dos familiares o amigos para la realización del TEST de memoria autobiogrĆ”fica que ahĆ se establece y envĆe por correo la evidencia de su trabajo a mĆ”s tardar el dĆa 14 de junio.
Los dĆas 17, 18 y 19 de junio estarĆ” disponible la EVALUACIĆN de toda la UNIDAD 4, sin embargo previo a ello, podrĆ” participar en la PONENCIA EN TIEMPO REAL que serĆ” impartida el dĆa 15 de junio a partir de las 11:00 horas en la plataforma cuyos datos le serĆ”n proporcionados por correo, por lo que es fundamental que notifique y reserve su participación, ya que al ser en tiempo real podrĆ” interactuar con sus compaƱeros y el docente, respecto a todo el contenido de esta unidad.
ā
Recuerde que las actividades de aprendizaje descritas en cada una de las subunidades que componen la unidad 4, representan el 35% de su evaluación, siendo la calificación mĆnima de 8 para continuar con el presente curso y acceder a la siguiente unidad.
ā
Si usted no presentó en tiempo alguna de las actividades referidas, ya no podrÔ solicitar prorroga alguna para ello.
Se revisarÔ con detenimiento todo el material enviado por correo para su valoración y consideración en la evaluación.
ā
Las actividades de esta subunidad deberÔn remitirse necesariamente al correo electrónico:
ā
Las actividades que se remitan al anterior correo no serÔn tomadas en consideración, ya que la dirección del mismo a partir de este momento sólo serÔ utilizado para efectos informativos pero no para recibir actividades de aprendizaje.
ā
Si requiere apoyo sobre el particular, puede contactarnos a travĆ©s del siguiente formulario o mediante asistencia en whatsapp y facebook de lunes a viernes de 10:00 a 21:00 horas; sĆ”bados de 10:00 a 18:00 hrs. Las peticiones formuladas en dĆas domingo serĆ”n resueltas hasta el lunes.
Disponible 17, 18 y 19 de junio
